La Presidenta defendió el rol del Estado en el 75 aniversario del Banco Central

La presidenta Cristina Fernández encabezó hoy el acto conmemorativo del 75 aniversario del Banco Central de la República Argentina. Allí defendió el rol del Estado la administración de la economía y reiteró la necesidad de modificar los organismos multilaterales para adaptarlos a la nueva realidad mundial, como así también eliminar el doble estándar que aplica la comunidad internacional para el tratamiento de conflictos. La Jefa de Estado señaló además que la crisis global de los mercados financieros "pone en debate y discusión el modelo instalado en Argentina desde mediados de la década del 70, que tuvo su desarrollo en los 80 y que alcanzó su esplendor en los 90, en el marco del Consejo de Washington", y que propendía a la desaparición del Estado y la autonomía absoluta de los Bancos Centrales" como si la economía de un país dependiera únicamente del cuidado de su signo monetario". Para la presidenta, el Banco Central debe administrar el signo monetario de manera tal que permita "sostener la actividad económica, la producción, aumentar la generación de empleo, y de mejor empleo". Por eso afirmó que el rol del Estado es central para no dejar "las cosas libradas a la naturaleza del mercado" y evitar que se imponga "el más crudo darwinismo social". La jefa de Estado aseguró que el modelo económico que se instaló en nuestro país a partir de la gestión de su antecesor en el cargo, el ex presidente Néstor Kirchner, en 2003, tiene como eje central la reindustrialización del país para poder generar empleo, tener un fuerte mercado interno para poder afrontar eventuales crisis del sector externo. Por eso, apeló a "despojarnos de los dogmatismos y prejuicios que arrastramos todos" y reconocer que "la Argentina tiene un sistema financiero sólido", consolidado a partir de las políticas macroeconómicas y de desendeudamiento llevadas adelante por su administración. "Nos hemos venido desendeudando con recursos propios y producimos materias primas suficientes, a la vez que acumulamos grandes reservas", explicó la Mandataria, al tiempo que afirmó que "sin embargo, las calificadoras de riesgo hacen un ejercicio de cinismo pocas veces visto". "Esto deberá ser debatido en la próxima reunión del G-20 para tomar de una buena vez por todas el toro por las astas", aseguró la jefa de Estado.